Somos Oviedo-Uviéu exige que se suspenda la prórroga de la concesión que gestiona el albergue de animales de Oviedo. El Ayuntamiento no ha seguido los pasos que marca la ley con una intención clara: Terminar con un ejemplo de gestión modélica del centro y deshacerse de una empleada modélica y terminar la participación de un gran número de personas implicadas en el bienestar animal de la ciudad.
La portavoz de Somos, Ana Taboada, dijo que “La prórroga nunca debió concederse. Está mal hecha desde el primer momento. Tenían la información delante y miraron para otro lado. El ayuntamiento ejerce una vez más una dejación intencionada de funciones. No exige que se cumpla la ley, ni hicieron un examen exhaustivo de las cuestiones técnicas para impedir que accediera a la cesión esta empresa. Engañan a ciudadanos y asociaciones”.
“Además”, agregó Taboada, “el concejal Nacho Cuesta, representante del bipartito, miente. Esa omisión sucede en paralelo a la redacción de informes por parte del ayuntamiento que, de aprobarse, son el fin del modelo de gestión modélica con implicación de voluntariado, que se había perfeccionado en el Albergue de animales de Oviedo”.
“La prórroga de la concesión era fácilmente evitable”, detalló Taboada. “Desde octubre de 2020 cuando surge la posibilidad de cesión, ni hicieron nada para evitarla. La ley exige una autorización expresa del ayuntamiento para que suceda, no era algo automático. Esa aprobación requiere dos análisis: Condiciones técnicas y económicas. No valoraron las condiciones técnicas. Su excusa, que tienen contratos en otros ayuntamientos. Pero allí sólo hacen lacería de animales y no gestión de albergue, en los términos establecidos en los pliegos de este”.
“El resultado”, continuó la concejala “es la entrega de un centro municipal a una empresa de dudosas practicas que incumple las condiciones desde el primer día: Impide acceso al voluntariado al albergue, no subroga los contratos laborales y despide a una empleada referente en el sector trabajadores. Suspende las adopciones internacionales y pretende cobrar a las entidades colaboradores por la custodia de los animales y los chips a quienes adoptan. Además ha trasladado animales a otros concejos”.
Respecto a la empleada despedida, Taboada fue tajante: “La palabra de este gobierno no tiene valor alguno. Se pone en una situación muy vulnerable a una persona referente de los cuidados animales en la ciudad, hay que respetar sus derechos laborales, el ayuntamiento debe instar a la reintegración inmediata en su puesto de trabajo”.